domingo, 31 de mayo de 2009

el profesor del deseo


"No puedo apartar los ojos de ella, esta noche. Entre los dos grabados de Viejo Maestro de ambos ancianos, a la luz de la luna, arrugados, con abolsamientos en la cara, el rostro de Claire me parece, más que nunca, tan suave manzana, tan pequeño manzana, tan resplandeciente manzana, tan sencillo manzana, tan fresco manzana... nunca más carente de artificialidad ni más impecable, nunca tan... Sí, y ¿a qué estoy atándome ciega y voluntariamente, que con el tiempo nos alejará? ¿Por qué seguir lanzando contra mí mismo este embrujo por el cual nada pasa el tamiz, salvo lo que me gusta? ¿ No hay algo un poco dudoso y onírico en tanta adoración, tan suave y tan tierna? ¿Qué ocurrirá cuando lo demás de Claire acabe imponiéndose? ¿Qué ocurrirá si no hay lo demás? ¿ Y qué pasa con lo demás de mí? ¿Cuánto tiempo seguirá esto pareciéndome una ganga?¿Cuánto tardaré en estar hasta la coronilla de la saludable inocencia, cuánto tiempo pasará antes de que la encantadora blandura de la vida con Claire empiece a resultarme pesada y empalagosa, y vuelva a encontrarme tirado, lamentando lo que he perdido y buscando otra vez un camino propio?"

El profesor del deseo. Philip Roth

No hay comentarios: